Así empezaba (o al menos eso creo):
Esto es una despedida de algo que nunca tuvo bienvenida, ni siquiera sabemos cómo ni porque empezó o mejor dicho porqué pasó. Y se dio así, por mi admito que me resistí todo lo que pude, pero de un instante a otro, vos así, siendo todo lo hermosa que sos, apareciste e hiciste lo que quisiste conmigo, con mis formas, con mis días, con mi vida. En resumen me descolocaste del mundo, y estuvo bueno, lo necesitaba, necesitaba sentirme así, vivo, con ganas de muchísimas cosas, con mucha más esperanza de la que tengo habitualmente. Con ganas de vos todos los días...