Oscuro de llover.

 Iba en camino a verte por última vez. Supongo que fue por eso que esa mañana el sol decidió no aparecer, mientras iba en el tren pensaba en vos, porque siempre estoy pensando en vos, y me puse a escribirte una carta.

No sabía cómo empezar ni que iba a decirte, mil veces te había dicho todo, ya nada tenía sentido, me aburre ser repetitivo. Siempre te dije que no quería que perdieras el tiempo conmigo. Pero a medida que me acercaba a vos me iba alejando y mientras esto pasaba ese día gris, nublado, se volvía oscuro, oscuro como cuando sabés que irremediablemente va a llover.

Todavía no sabía que iba a decirte en la carta, ya nada tenía sentido, era lo último que iba a hacer por vos, por mi, por nosotros, ya no quería perder más el tiempo.

Bajé del tren y venía esa brisa del mar, la conocés muy bien, hacía calor pero estaba oscuro, eran las 12:07 del mediodía, como olvidarlo. Y me fui a dejarte ahí para siempre, no me costó mucho, ya era hora. 

Perdoname, perdoname por haber llegado tantos años tarde, hice lo que pude. 

Nadie perdió a nadie.

Sabía que ibas a venir © , Todos los derechos reservados. Diseñado por mi, claro Gracias por leer